Para empezar, lo primero que haremos será derretir las barras de chocolates y la mantequilla (o el aceite de coco) ya sea en un microondas, horno o incluso en baño de maría. No es completamente necesario tener una caldera doble, podemos reemplazarla colocando un recipiente de vidrio sobre una olla con agua hirviendo. Nos aseguramos de que el agua no cubra al tazón. Debido al calor del vapor, el chocolate se derretirá , una vez esto suceda lo ponemos a un lado para que se enfríe durante unos minutos antes de proceder al siguiente paso.

Agregamos el resto de los ingredientes excepto las nueces y removemos poco a poco para que se vayan incorporando.

En este paso nos encargamos de echar la masa en una fuente de horno engrasada pequeña que se encuentre forrada con papel pergamino. (Muy importante que no sobrepase las 4×6 pulgadas).

Cubrimos con maní picado y posteriormente lo llevamos al refrigerador a que enfríe.

Una vez la masa se encuentre lista, nos encargaremos de cortarla en cuadros pequeños con un cuchillo de buen filo. No olvide mantener todas las golosinas pequeñas, no más de un cuadrado de 1×1 pulgada. Finalmente la almacenamos en el refrigerador ¡Y listo!

Listo nuestro postre para una merienda deliciosa y saludable.